“He puesto mi arco iris en las nubes, y será la señal del pacto entre mí y la tierra”.
— Génesis 9:13
Si el sol brilla mientras cae la lluvia, a menudo es un buen momento para buscar un arcoíris. La luz del sol brilla a través de las gotas de agua para formar un hermoso espectro de color en el cielo.
La belleza del arco iris puede ser sorprendente y espectacular. Un arco iris que aparece después de una tormenta aterradora puede traer la esperanza de un clima más despejado en el futuro.
Dios usó el arcoíris para dar una señal de esperanza a Noé, y ese es un recordatorio para nosotros todavía hoy. Después de que el mundo fue destruido por un diluvio a causa del pecado de la gente, Dios prometió no volver a enviar un diluvio así. Dios prometió no dejar que el pecado se interpusiera entre él y su pueblo. El arcoíris es un hermoso signo de esperanza porque es como un arco sin flechas, como si estuviera colgado en una pared después de la batalla, para nunca más ser disparado. Eso nos recuerda la promesa de que Dios siempre nos amará.
Cuando ves un arcoíris, puedes verlo como parte de la hermosa creación de Dios. También puede verlo como una señal de la hermosa promesa de salvación de Dios, una promesa que Dios está seguro de cumplir.
Dios de las promesas, te alabamos porque tus promesas son seguras. Danos esperanza en el futuro que has prometido traer. Asegúranos con signos de tu amor por nosotros. Amén.
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